Viaje a Tailandia

Ayer al llegar a Ayutthaya un hombre, Juan, nos ofrecio hacer una excursion por las ruinas, pero como llegamos a las seis y estaba cerrado, nos dijo de hacerlas al dia siguiente a las nueve de la manyana.

Nos dejamos convencer y nos llevo a un sitio barato, pero bastante sencillo. Cenamos en un restaurante recomendado por la guia, con teoricas vistas a un monumento, se olvido comentar que habia un arbol en medio. Un par de birras locales y por la noche dormimos juntitos, no paso nada :)



Hoy Juan nos ha venido a recoger justo cuando acababamos de desayunar. Era bastante amable, pero nos dejaba a nuestra bola en los templos. Nos hemos hecho una foto con Juan y su tuk-tukpara que lo conozcais.



Nos ha esperado para comer y nos ha traido a un hotel para escribir algo por aqui. Para subir el resto de las fotos habra que esperar.

Ahora iremos a Sukhotai, en bus unas seis horas. Mas piedras :)

Nada mas levantarnos, hemos ido a que nos hicieran un masaje tailandes tradicional (8 euros 2 horas). Es espectacularmente doloroso, nos han crujido hasta las orejas, se han paseado por encima nuestro, y ahora no podemos ni andar...

Para comer, literalmente, hemos probado la sopa tailandesa, solo probado. Segunda cagada. Pedir sin picante, aunque le digas muy poco picante, suele picar.

Ahora a Ayutthaya, en autobus pues el tren no va por manifestacion (nos lo ha dicho tambien en informacion turistica, no es un bulo). A pesar de eso, por aqui no se nota nada, todo muy tranquilo y seguro. La gente de aqui no esta preocupada.

Ya hemos llegado a Bangkok. Tuvimos un pequenyo percance en el control de inmigracion. En la tarjeta del visado, Sergio puso el numero de vuelo de BCN a Zurich en lugar de Zurich a Bangkok, y las chicas del control no lo encontraban. Luego al ver nuestra profesion nos echaron la culpa de sus problemas informaticos. Pero finalmente hemos pasado.

Lo primero, hemos ido a buscar hotel (20 euros la noche con aire acondicionado). Despues, de compras. Primera cagada. La ropa de imitacion es muy cara (para ser de imitacion) y la que no lo es, no es tan barata como pensabamos, asi que parece que tocara lavar ropa.



Por la noche salimos a tomar el pulso a la ciudad. Unas copas y de vuelta a casa a descansar que manyana vamos a Ayutthaya.